La tapa cada día es más famosa dentro y fuera de nuestras fronteras, en gran medida Valladolid tiene mucho que ver en esta internacionalización gracias a sus quince años de concurso nacional y los tres del mundial.

La organización de la mayor y más importante competición de tapas del mundo, ha querido celebrar la esencia del concurso, aunando el homenaje a la tapa como el formato gastronómico español más internacional, con la oportunidad y la realidad de que la cocina, la buena cocina, no depende del lugar sino de la profesionalidad, la pericia y la creatividad del cocinero o cocinera.

Y lo ha celebrado eligiendo para la presidencia de los jurados de los certámenes a dos ejemplos, dos espejos en los que los concursantes pueden mirarseCarles Abellán y María José Meda, ambos portadores en sus locales de la anhelada estrella Michelín.


Carles Abellán, presidente del Jurado del III Campeonato Mundial de Tapas

Carles Abellán, chef y propietario del bar de tapas La Barra (Barcelona), es el primer chef del mundo galardonado con una estrella Michelín en un bar de Tapas. La Barra, situado ante la playa de La Barceloneta, es un establecimiento con dos mostradores paralelos y terraza donde a diario se sirven tapas tradicionales y creativasrealizadas sobre la marcha para unos 400 clientes.

Carles Abellán fue el primer jefe de cocina de El Bulli, nombrado por Ferrán Adriá, donde se inició, formó y aprendió a crear propuestas asequibles y lúdicas comprometidas con el formato de la tapa.

Su espléndida trayectoria profesional y la condición de ser el único chef galardonado con estrella Michelín por su autoridad ante las tapas, decidió a la organización del Campeonato Mundial de Tapas nombrarle presidente del jurado.


María José Meda, presidenta del Jurado del XV Campeonato Nacional de Tapas

María José es la chef propietaria de la Hospedería rural El Batán, situado en Tramacastilla, en la sierra de Albarracín (Teruel). Tras años de formación en ciencias sociales y en cocina, tanto autodidacta como académica, María José, nacida en Teruel, eligió la remota población de Tramacastilla para abrir con su pareja el establecimiento rural del que es chef y propietaria. Tras años de esfuerzo, Michelin mencionó su destreza culinaria en 2012 y, dos años después le otorgó la estrella que aún mantiene.



El Batán es hoy un restaurante de fama mundial al que acuden a diario, incluso en helicópterocomensales de China, Japón, Estados Unidos…, no sin antes pasar por lista de espera.

María José Meda es el claro ejemplo de que el reconocimiento y el éxito en la cocina no pasan por disponer de un local de moda en una gran urbe, sino por el esfuerzo, la tenacidad, la ilusión y, finalmente, la profesionalidad del cocinero.

Ambos chefs representan y aúnan así la idea y esencia de lo que la ciudad de Valladolid viene defendiendo y potenciando desde hace ya quince años: que la tapa es la modalidad gastronómica más popular, colectiva e internacional de la cocina española. Con su presencia este año se cumple, además, un propósito: que los presidentes de los jurados de las competiciones nacional o mundial sean diferentes y presididos, cada año, por una chef y un chef de cocina. 

Los próximos días 4, 5 y 6 de noviembre, disfrutaremos de la presencia de ambos chefs en el XV Concurso Nacional de Pinchos y Tapas y en el III Campeonato Mundial de Tapas, que se celebrarán, como es habitual, en la monumental Cúpula del Milenio de Valladolid.