En Navarra existe un pequeño paraíso salado situado a más de 120 kilómetros del punto de mar más cercano y a 700 metros de altitud. Justo a los pies de la sierra de Urbasa y Andía, se encuentra un tesoro conservado desde hace 220 millones de años a 3.000 metros de profundidad. Se trata de un depósito de sales formado en el Triásico Superior a causa de la evaporación, sedimentación y reinundación del Mar de Tethys que cubría lo que hoy es la Península Ibérica. Los movimientos tectónicos relacionados con la formación de los Pirineos dieron lugar un fenómeno que se conoce como Diapiro, que tras millones de años de erosión provocó que la capa de sales del subsuelo subiera hasta la superficie en forma de manantial salado. En este manantial hoy brota agua con una salinidad muy superior al agua del mar y totalmente libre de contaminación que alimenta a más de 500 terrazas en las que Ancestral, gracias a la acción natural del viento y del sol, y al saber hacer de sus maestros salineros, extrae su sal de manantial 100% natural.
Al provenir de un manantial de montaña, todos los productos de Sal de Manantial Ancestral están completamente libres de contaminantes y tóxicos como microplásticos, nitritos o metales pesados, lo que convierte a esta sal en un ingrediente más saludable que la sal proveniente de agua del mar. Según los estudios, se han encontrado hasta 600 microplásticos en cada kilogramo de sal de mesa procedente de la evaporación de agua de mar, lo que significa que a diario con sal marina ingerimos restos y partículas de plástico.
En Sal de Manantial Ancestral, una familia de expertos salineros, ha conservado, generación tras generación, los procesos, herramientas y las mismas técnicas manuales, sin procesos químicos, que utilizaban los romanos en los siglos III y IV a.C. para explotar estas salinas. Gracias a la alta concentración salina y a su enclave privilegiado, Sal de Manantial Ancestral produce anualmente una cantidad limitada de un producto 100% puro con el que ha creado su gama de productos únicos compuesta por cuatro tipos de sal: Sal de Manantial Tradicional, Sal de Manantial en Piedras, Sal de Manantial en Flor y Sal de Manantial en Escamas. Además de todo ello, también han innovado proponiendo una Sal de Manantial líquida, que se convierte en un aliño perfecto para toda clase de salsas y ensaladas consiguiendo una mezcla completamente homogénea con el resto de los ingredientes.
El sabor de Sal de Manantial Ancestral resulta menos agresivo al paladar ya que en su composición tiene menos carga de sodio, resaltando y realzando el sabor de los alimentos.